Palabras

La palabra, como tinta sobre papel, no es sino una cuerda de símbolos. La palabra hablada es igual, pues no es sino una sucesión de sonidos. El truco es registrar las ideas que valen la pena y saber reconocerlas. Porque sin duda ahí están, pero es difícil capturarlas en el momento en el que ocurren. Al final está el trabajo, porque no hay idea genial que valga la pena si no se trabaja, esto es, no es la idea lo que vale, sino el trabajo que se le invierte al exponerla.

Einstein vs. Kafka

Kafka se encontró con Einstein en la oficina de patentes, y Einstein le preguntó a Kafka, “¿qué lo trae por aquí?”. Incómodo, por el tono casual de Einstein, Kafka respondió severamente, “nada más voy de paso hacia el juzgado para vigilar mi proceso.”

Einstein se afeitó la cabeza y continuó con su proceso en aquella oficina de patentes tan común.

Dimensiones, fuerzas y categorías

Existimos en tres dimensiones espaciales y una temporal, pero además existen cuatro fuerzas fundamentales. La gravedad genera cambios y movimiento, y los sujetos en el universo experimentan esos cambios ¿cómo? Se comunican a través de los lenguajes fundamentales. Lo que propongo es plantear a los lenguajes (mate y arte) como dos “fuerzas” fundamentales que son inherentes a “la dimensión mental”.

También pensaba en el principio antrópico, el big bang, y el tiempo plank. Esto me interesa para poder hablar de una singularidad mental.

Tanto la matemática como el arte son accesibles a todo en el universo. Entonces, el hecho de que nos sean accesibles a nosotros no debería sorprendernos, como tampoco debería sorprendernos que describan al universo. Después de todo, son producto de esa singularidad mental.

Con el pampsiquismo medio justifico aquello del universo mental, en tanto que puedo utilizar el pampsiquismo como cuerpo axiomático, simplemente tengo que fijar los axiomas mismos. El punto clave está en encontrar cómo justificar el hecho de que el big bang más una dimensión mental, dan origen al movimiento; y que en consecuencia el movimiento implica cambio, a saber, de posición.

Mi problema actual con la axiomatización, es el brinco del cambio, a la experiencia del cambio, y es por eso que ando tan metido en la fenomenología.

Tal vez, lo único que necesito decir es “supongamos que el hecho de que todo cambie en el tiempo (tenga movimiento) implica que dicho objeto, más que ser un objeto, es un sujeto, pues está sujeto al cambio del movimiento, es decir, experimenta cambios.”

Lo importante es entender a todo aquello que está sujeto al tiempo como un sujeto. Es así como podemos de la relación esclavista/clasista/categorista “sujeto-objeto”. Ojo, pues en inglés no hay diferencia entre “ser sujeto” y “estar sujeto a”, de ahí que pueda ser una solución elegante. (ver nota en cuaderno TATE 17/1/12).

En el caso de que el big bang exista antes del espacio-tiempo (ojo tiempo plank), existen los eventos durante el tiempo plank, que en sí mismos son eventos, es decir son cambios de estados y de momentos; por lo tanto implican movimiento, cambios y fefenomenología. Esto es válido incluso si no existe una dimensión temporal, o incluso la espacial, pues este “momento” puede existir como una dimensión paralela al tiempo.

La mente y los lenguajes

Pienso en pampsiquismo y fenomenología,
en universos mentales y la experiencia de las cosas.
Todo está sujeto al tiempo, el tiempo es una dimensión.
El tiempo implica movimiento y el movimiento implica cambios,
y si todo experimenta cambios, o movimiento, o el paso del tiempo,
todo tiene un componente mental.

En este universo no existe la relación sujeto-objeto;
todo es sujeto y todo está sujeto a las dimensiones.

Nada más.